M.C. Mayra Araceli Machuca Jiménez
Departamento de manejo y conservación del Estero “Palo Verde”
Centro Ecológico de Cuyutlán “El Tortugario”
El 2015 fue nombrado por la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) como el año Internacional de los Suelos; pero, ¿Qué son? y ¿Por qué son importantes?
En el transcurso de nuestra vida pocas veces nos detenemos a observar el lugar en donde estamos parados, ¿Sabes a qué me refiero?
El suelo es un elemento tan esencial para la vida como el agua que tomamos y el aire que respiramos. Es la parte exterior de la corteza terrestre y es formado a partir de la desintegración de las rocas por efectos del intemperismo; factores como el clima, la topografía y la vegetación determinan sus características. Se compone de finas partículas minerales así como de una gran flora y fauna microbiana, los hay de diferentes colores, olores y texturas de acuerdo a la zona en donde los encontremos.
El suelo es uno de los sistemas más complejos de la naturaleza, en él se llevan a cabo diferentes procesos físicos, químicos y biológicos que propician las condiciones adecuadas para el desarrollo de la vida en el planeta Tierra, es el hábitat de muchos microorganismos como hongos y bacterias que participan de una u otra forma en los procesos de descomposición de la materia orgánica y asimilación de los nutrientes para las plantas que son productores primarios y primer eslabón dentro de las cadenas alimenticias. Además, es un recurso de vital importancia para muchas de las actividades productivas como la agricultura y la ganadería.
Sin embargo, el inadecuado manejo de los recursos naturales como la deforestación de la parte alta de las cuencas, los cambios de uso de suelo, la sobreexplotación de las tierras con vocación agrícola, el sobrepastoreo, la pérdida de fertilidad por la intensificación de los monocultivos y la aplicación de exorbitantes cantidades de agroquímicos ha puesto en un punto crítico la continuidad de todos los servicios ambientales que el suelo nos provee.
Pero no todo está perdido, en la actualidad muchas personas e instituciones a nivel nacional e internacional trabajan en programas de restauración de suelos, la mejora de prácticas agrícolas – como la agricultura orgánica, la agroecología, la agricultura de conservación y la agrosilvicultura – y la adopción de técnicas de conservación del suelo, con el fin de mitigar los impactos negativos. El trabajo no ha sido fácil, es muy costoso pero es impostergable. Es necesario seguir trabajando en unión con los diferentes niveles de gobierno, que vaya a la par de los intereses políticos y económicos de cada país pero a partir de la implementación de un modelo de desarrollo que sea incluyente, que parta de lo local y en donde se consideren a todas las partes para la toma de decisiones.
Actualmente, en el Centro Ecológico de Cuyutlán “El Tortugario” – con su objetivo de conservar los recursos naturales costeros de la región – trabajamos intensamente desde hace varios años en la generación de conocimiento técnico-científico de una parte del territorio correspondiente a un humedal costero denominado Laguna de Cuyutlán (del cual el vaso III y IV son Sitio Ramsar desde 2010) que es hábitat de una gran diversidad de flora y fauna de importancia ecológica y económica para la región. Como resultado del trabajo que se ha realizado en la conservación de este humedal, consideramos fundamental incluir la parte social, por lo que trabajamos de manera conjunta con un colectivo de actores locales –agricultores, ganaderos, pescadores y salineros- que desarrollan sus actividades productivas en las inmediaciones de este territorio; el objetivo principal es lograr unificar esfuerzos para realizar prácticas productivas sostenibles que vayan acorde a sus necesidades y que garanticen la funcionalidad del sistema, la conservación de los suelos y con ello la permanencia de sus actividades productivas para las generaciones futuras.
Literatura consultada:
Campos, A., Hernández, M., Moreno-Casasola, P., Cejudo, E., Robledo, A. y D. Infante, 2011. Soil water retention and carbon pools in tropical forested wetlands and marshes of the Gulf of Mexico. Hydrological Sciences Journal 56(8): 1388-1406.
FAO, 2015. Suelos y biodiversidad. Organización de las naciones unidas para la alimentación y la agricultura. En línea: fao.org/soils-2015
FAO, 2015. El suelo es un recurso no renovable. Organización de las naciones unidas para la alimentación y la agricultura. En línea: fao.org/soils-2015
FAO, 2015. Los suelos almacenan y filtran agua. Organización de las naciones unidas para la alimentación y la agricultura. En línea: fao.org/soils-2015