M.C. Mayra Araceli Machuca Jiménez
Centro Ecológico de Cuyutlán “El Tortugario”
Unidad para la Conservación de la Vida Silvestre
Los manglares son asociaciones vegetales que presentan características muy particulares; en el mundo vegetal cada grupo de especies tiene lo suyo. Algunos de sus rasgos más sorprendentes son la capacidad que tienen de vivir en zonas inundadas, la tolerancia a variadas concentraciones de salinidad en el agua así como adaptaciones morfológicas-raíces aéreas en el mangle rojo (Rhizophora mangle) para darle soporte o glándulas secretoras de sal en las hojas del mangle negro (Avicennia germinans)- que les permiten sobrevivir en esos ambientes tan diferentes y cambiantes.
Estos ecosistemas se distribuyen en 121 países de las zonas tropicales y subtropicales del mundo. México es uno de esos países privilegiados, tiene 17 estados costeros que presentan ecosistemas de manglar. En la costa del Pacífico se encuentra el estado de Colima (5,450 km2 y un litoral de 159 km) en este espacio geográfico se distribuyen diferentes ecosistemas como los bosques de pinos, encinos y bosques de niebla, pequeños manchones de selva mediana, selva baja caducifolia y finalmente en la planicie costera encontramos exuberantes bosques de manglar que se encuentran en humedales costeros como: la Laguna de Juluapan, Laguna Valle de las Garzas, Laguna de Cuyutlán, Estero Palo Verde y Estero el Chupadero ¿Conoces alguno de estos lugares?
Colima es un territorio muy rico en recursos naturales y su zona costera posee áreas muy valiosas donde se han establecido un gran número de actividades socioeconómicas como la pesquería, agricultura, acuacultura, industria, minería, desarrollo urbano, turismo, entre otros. Estas zonas son cada vez más valoradas por la sociedad, así como por los inversionistas nacionales y extranjeros, por lo que el crecimiento poblacional y económico son algunas de las principales razones que explican la presión, el impacto y la pérdida de un sin número de hectáreas de ecosistemas costeros como los manglares.
El costo ecológico del desarrollo económico
Los manglares son uno de los ecosistemas más productivos del mundo ¿Sabías que más del 80% de la fauna marina de importancia comercial como crustáceos (camarones, langostinos y cangrejos) y peces (como los pargos, robalos, dorados, jureles y lisas) utilizan estos lugares como áreas de refugio y alimento? Estos recursos son fuente de alimento para miles de personas así que constituyen un elemento vital para la soberanía alimentaria de los pueblos.
Con el propósito de conocer cuántos recursos y dinero perdemos cada que se deforesta una hectárea de manglar se han realizado estimaciones en donde el valor calculado es de $22,043 millones de pesos para los manglares de todo el mundo. En algunos estudios realizados en países latinoamericanos se han calculado un valor que va desde $1,712 pesos a $1,362,500 pesos por hectárea por año de acuerdo a la región en donde se encuentren (en países del caribe el valor es el más alto por la actividad de turismo que se realiza en estos ecosistemas). Así que cada vez que se tala, quema, rellena o desaparece una hectárea de manglar para la construcción de carreteras, zonas urbanas, industrias y puertos perdemos cientos de miles de pesos.
La Comisión Nacional para el Uso de la Biodiversidad (CONABIO) reporta que para el año 1981 en nuestro país había 856,308 hectáreas de manglar y que en menos de 30 años se perdieron 91,822 hectáreas, la misma superficie que ocuparían 128,602 campos de futbol juntos del tamaño de estadio azteca. ¿Ya hiciste la cuenta de cuánto dinero hemos perdido?
Los manglares de Colima
En la actualidad, el panorama para Colima no es distinto. La mayoría de los humedales con presencia de manglar en esta entidad federativa han sido severamente impactados como resultado de diversas actividades antropogénicas entre las que destacan: la agricultura, ganadería, actividades extracción de sal, la construcción de la Central Termoeléctrica de Manzanillo, la construcción de una Terminal de Gas Natural Licuado (TGNL), un gasoducto entre Manzanillo y Guadalajara, así como una extensa red de carreteras y transporte ferroviario y finalmente, la ampliación del puerto en Manzanillo. Extensas áreas de manglar han sido cambiadas para la instalación de estas actividades socioeconómicas y con ello hemos perdido invaluable capital natural que ya no se recuperará. Para 1971, Colima contaba con 6,589 hectáreas de manglar. En un periodo menor a 35 años se perdieron 50.87%, así que para el 2010 ya sólo nos quedaban 3,237 hectáreas. Sin embargo, la presión sobre este recurso no ha cesado, las miras de los inversionistas, así como los intereses y compromisos políticos no se detienen.
En la zona costera de Colima se encuentra uno de los manglares más conservados, estamos hablando del Estero Palo Verde que forma parte del Vaso IV de la Laguna de Cuyutlán. Este humedal, declarado en el 2011 como Sitio Ramsar (nombramiento internacional que se le da a los humedales por su valor en la conservación de especies de importancia ecológica), es hábitat y refugio de aproximadamente 170 especies distintas de aves residentes y migratorias. También es casa de una de las poblaciones más importantes de cocodrilo de río (Crocodylus acutus) así como de iguanas verdes (Iguana iguana), además, dos de las cuatro especies de manglar que se distribuyen en la región -el mangle blanco (Laguncularia racemosa) y el mangle rojo (Rhizophora mangle)- están presentes allí.
26 de Julio: Manteles largos para los manglares
El 26 de julio es el Día Internacional del Manglar, a nivel internacional cada año se realizan en esta fecha una serie de acciones y eventos con motivo de promover la conservación de este importante ecosistema tropical. En la actualidad, el ecosistema de manglar se encuentra amenazado por el cambio en el uso del suelo, la contaminación y la sobreexplotación de sus recursos de una forma acelerada y desordenada, lo cual ocurre en muchas ocasiones por el desconocimiento y el escaso interés que existe de la población en general.
Aunque ha sido grande la pérdida de los manglares en el estado, aún nos quedan muchas hectáreas para conservar y proteger. Así que este año Colima también se pone de manteles largos. Es necesaria la participación ciudadana en este proceso, es por eso que en instituciones como el Centro Ecológico de Cuyutlán “El Tortugario” (CEC “El Tortugario”) trabajamos intensamente con proyectos de investigación, talleres de educación ambiental y programas de divulgación para sensibilizar a la población local así como a los tomadores de decisiones sobre importancia de la conservación de este valioso recurso. Estamos plenamente convencidos que no podemos conservar lo que no conocemos, así que es de vital importancia compartir el conocimiento generado en centros de investigación, universidades y en instituciones locales como el CEC “El Tortugario” y de esa forma dar a conocer la importancia y los beneficios que recibimos de estos ecosistemas.
Para conocer más de cerca estos maravillosos ecosistemas, te invitamos a que en tus próximas vacaciones te acerques a uno de los sitios con presencia de manglar en Colima; el Estero Palo Verde es una buena opción. Además, si quieres aprender más de los manglares puedes consultar el escrito que publicamos en el mes de febrero que lleva por título: Los manglares: superhéroes del mundo vegetal.
Literatura consultada
CONABIO. 2009. Manglares de México: Extensión y distribución. 2ª ed. Comisión Nacional para el Conocimiento y Uso de la Biodiversidad. México. 99 pp.
Machuca-Jiménez, M. A. 2014. Uso y manejo de la Zona costera del Estado de Chiapas. Tesis de maestría. El Colegio de la Frontera Sur. Tapachula, Chiapas.
Scodanibbio, L., Rivas, A., Fuentes, M., Muller, B., Martín, M. y R. Sambula. 2012. Proyecto Manglares: Manejo integrado de las zonas costeras y gestión sostenible de los manglares de Guatemala, Honduras y Nicaragua. PNUMA. 12 pp.
Silva-Bátiz, F.A., S. Hernández-Vázquez, A.J. Nené-Preciado y A.D. Vázquez-Lule. 2009a. Caracterización del sitio de manglar Laguna de Cuyutlán, en Comisión Nacional para el Conocimiento y Uso de la Biodiversidad (CONABIO). Sitios de manglar con relevancia biológica y con necesidades de rehabilitación ecológica. CONABIO, México, D.F.
The Ramsar Convention of Wetlands. 2012. Disponible en: http://www.ramsar.org/cda/es/ramsar-home/main/ ramsar/1_4000_2__. Consultado el 05 de mayo de 2016.
Torres-Fernandez del Campo. J. 2016. Los manglares: superhéroes del mundo vegetal. En línea: http://tortugariocuyutlan.com/los-manglares-superheroes-del-mundo-vegetal/
Torres, J. y A. L. Quintanilla-Montoya. 2014. Alteraciones antrópicas: historia de la Laguna de Cuyutlán, Colima. Investigación Ambiental 6(1): 29-42.
Tovilla, C., Pérez, J. y A. Arce. 2009. Gestión litoral y política pública en México: Un diagnóstico. En: Barragán, J. Manejo costero integrado y política pública en Iberoamérica: Un diagnóstico. Necesidad de cambio. CYTED-Ibermar. 380 pp.